Era un desayuno atípico para mí. Era un desayuno a la mañana (igual, aún era de noche). El metódico desayuno con leche descremada, 2 sobres de edulcorante, 30% de cereal, 6 galletas de agua, y otro 30% de la taza en cereal.
La radio me molesta, pero no me deja apagarla. Empieza a sonar un cover de los Beatles bastante agradable que llego a disfrutar, pero poco antes de concluir tanto el tema como mi taza, noto que lo pude disfrutar dentro de todo por ser un cover, ya que al tema original... me lo robaron.
El tema original me fue sustraído por una mendocina, de nada sirve hacer la denuncia a la policía, aún cuando mis pruebas sean suficientes no hay solución alguna que la policía me pueda brindar, esa canción nunca volverá a ser mía. Cada vez que la escuche, aunque esté distraído, llegará un estribillo o una estrofa que me recordará a ella, a su robo. Como visita inesperada e indeseada aparecerán en mi mente memorias de su sonrisa, de su tonada, de su mirada pícara, de las charlas, de su nariz fea, de situaciones y de sus besos, pero por sobretodo, del momento mismo en que compartimos la canción, ni se me ocurrió pensar por aquel entonces que estaba siendo victima de un robo.
No fue la única canción que me robo, pero la otra no me importa tanto, tampoco fue la única ladrona, otras me han robado "Down With My Baby", "This Is Goodbye", "Ain't no sunshine" y algún que otro tema romanticon pasajero. Por eso trato de ser más cuidadoso en cuanto a qué escucho con quien, para no sufrir robos importantes, pero los robos menores (canciones que no me gustan demasiado) no dejan de ser una molestia en algunas ocasiones.
Sólo espero haber podido robar algunas yo también, pero esa es una triste particularidad de estos crímenes nefastos, quien roba ni sabe ni disfruta lo robado.
¿Se podrá asociar a la fuerza canciones a sentimientos y memorias?
ResponderEliminarComo en La Naranja Mecánica. Pero sin locura y cosas malas.
Seguro, pero me parece que más efectivo es cuando se da de manera natural.
ResponderEliminarUna vez alguien me contó que tuvo una relación que en un momento dado quería terminar, ella lo notó y empezó a llevarlo a distintos lugares comunes de la ciudad, supuestamente, con la intención de que cuando el volviera a ellos la recordara a ella.
Suena algo paranoico, pero no lo descartaría.
Interesante.
ResponderEliminarPero prefiero el método deliberado.